Tratamientos

Uso correcto de tratamientos para la caída del cabello:
Para seguir correctamente el tratamiento preventivo hay que aplicar el champú anticaída dos o tres veces a la semana, intercalado con un champú suave de uso diario. Se debe aplicar sobre el cuero cabelludo y el cabello, previamente mojado, con la ayuda de un ligero masaje y aclarar con abundante agua. A continuación, realizar un segundo lavado y dejar actuar entre tres y cinco minutos sus principios activos para su mayor efectividad. Otra pauta de cuidado sencilla y efectiva es estimular los vasos sanguíneos que nutren al pelo desde su formación (matriz) ayudándolo con un suave masaje circular en el cuero cabelludo con la yema de los dedos, así consigues que funcionen correctamente aportándole las sustancias que necesita el pelo para un crecimiento sano y fuerte. Además de aplicar con una continuidad el producto de ampollas o lociones para la caída, respetando la duración del mismo para poder conseguir los resultados deseados que serán visibles normalmente a partir del segundo mes.

Uso correcto de los champús para el lavado del cabello:
Debemos tener siempre en cuenta, para conseguir un cabello muy limpio y cuidado, elegir el champú apropiado a nuestro tipo de cabello y cuero cabelludo. Utilizar una pequeña cantidad de champú, después aclarar abundantemente , pues una de las primeras causas de que un cabello se muestre apagado suele ser el uso de demasiado producto y un aclarado insuficiente. También es recomendable masajear suavemente el cuero cabelludo para estimular las glándulas que producen los aceites responsables del brillo.


Sólo con el conocimiento y la elección correcta de los productos para cuidar nuestro pelo desterraremos el mito de que lavarse el cabello todos los días repercute negativamente en la salud del cabello. Según los expertos, se puede lavar el cabello todos los días con un champú para uso frecuente en una sola aplicación. Eso sí, hay que evitar frotarlo: basta con realizar un delicado masaje en el cuero cabelludo y aclararlo siempre muy bien.